Miércoles
1 de marzo
TEÓRICO Nº 17
DISCURSO
POLÍTICO y PODER
Guías de Lectura
“Discurso político y poder”
DISEÑO.COM
Capítulo 15
- Poder como sustantivo, como adjetivo, como verbo. Se posee, es una
cualidad o es una acción.
- La Política como retórica del Poder.
- El Poder y las “tres perspectivas”.
- Discurso Político: un enunciador y tres destinatarios.
- Un discurso con un enunciador y “esos” tres destinatarios: un
discurso político.
- La política como texto, como representación y como juego.
TEXTOS COMPLEMENTARIOS
OBLIGATORIOS (en DISEÑO.COM)
- Discurso Hipócrita y Discurso Cínico. Analogías y diferencias.
- El silogismo del Discurso Cínico: “honesto” de la hipocresía.
- Las personas y sus discursos: la opinión.
- Figuras del Mito y Operaciones Retóricas de los Discursos
Hipócritas y Cínicos.
- Corruptela y corrupción.
- La corrupción. Tres Modelos.
TEXTO COMPLEMENTARIO OBLIGATORIO
El discurso
político del semestre
Publicado en Página/12
el 17 de agosto de 2016
Analizando el
discurso del oficialismo en el primer semestre del año, Álvaro Rosado pone en
evidencia los recursos y los eufemismos de una práctica discursiva sólo
comprensible en su contexto.
El
discurso político y los medios o los medios y el discurso político resultan
inseparables. Siguiendo la lógica saussureana, es algo así como intentar
apartar significado y significante. En el primer semestre del año en curso el
discurso del gobierno ha marcado una impronta y necesitó del apoyo de los
medios hegemónicos que han sabido actuar libremente naturalizándolo y sin
cuestionamiento alguno. Ante todo es necesario comprender que cuando hablamos
de discurso hacemos referencia a una práctica social sólo posible con un uso
lingüístico en un contexto determinado. Por cierto, todo discurso además de
complejo y heterogéneo, necesita de estrategias, metas o intenciones para
lograr los fines propuestos. Debe entenderse también a los discursos como signos
a ser entendidos, codificados y comprendidos, pero mejor aun, el de ser
evaluados, apreciados para luego convertirse en obedecidos y creídos. Barthes
lo llamaba “olfato semiológico”, es decir, a esa capacidad que deberíamos tener
de captar sentido donde estaríamos tentados de ver sólo hechos o de identificar
unos mensajes allí donde sería más cómodo reconocer sólo cosas.
Dicho
esto, analicemos el discurso de Cambiemos. Empecemos con algo de retórica. Es
sabido que todo gobierno propone y plasma un relato que hace suyo, que lo
identifica y que se impone en los medios. No hablamos un discurso, sino, el
discurso nos habla. Todos los términos que utilizamos poseen múltiples
significados, pero terminan efectivizándose algunos por sobre otros. La
retórica busca persuadir o influir a alguien. Aspira a hacer más atractivo lo
posible. Siguiendo con esto, es viable pensar el uso (a veces excesivo) de los
eufemismos, procedimiento atenuante, que tiene como finalidad sustituir una
expresión que puede chocar con otra que sea compatible con los tabúes y las
convenciones sociales. Aquí van algunos: para no decir ajuste, impuestazos o
tarifazos se los suele llamar “sinceramiento” o “reacomodamiento de tarifas”;
ya no hay más despedidos o echados de sus puestos de trabajo, sino, “reducción
de cargos públicos”; la palabra devaluación dejó de existir para dar paso a un
viento fresco y alegre de “levantamiento del cepo”. Si bien la forma de los
eufemismos pueden variar, llegan a veces a convertirse en lítotes (decir menos para
decir más) o cambiarse a hipérboles (exageración). Bourdieu en “¿Qué significa
hablar?” señalaría que los discursos en parte son eufemismos debido a que busca
hablar bien, de hablar como es debido, de producir productos conformes a las
exigencias del mercado lingüístico.
Continuando,
el gobierno se empecinó en borrar cualquier atisbo referido a la cuestión
política. En Fútbol para Todos se pidió que fuera “completamente despolitizada”
prohibiendo frases tales como “en todo el país”, “de Ushuaia a La Quiaca” o “el
fútbol grande de la Argentina”. En un clásico, un relator acérrimo detractor
del anterior gobierno, llamó al boquense Andrés Chávez “el comandante” en
alusión al ex presidente de Venezuela Hugo Chávez. ¿Se imaginan dejar de
nombrar al estadio de Racing (Juan Perón), Gimnasia y Esgrima La Plata (Juan
Zerillo político radical) o de Colón (Brigadier López, gobernador y caudillo
santafesino) por considerarlos hombres de la política argentina?
Para
Nietzsche somos voluntad de poder. Somos en tanto potencia y por eso acción.
Todos nuestros actos se convierten en políticos y se vuelven voluntad de poder.
Es imposible salir de “lo político” (como lo antagónico e inherente a todas las
sociedades) por eso las frases confrontativas como “grasa militante”, “infectados
de mala ideología” o “pesada herencia”. Por otro lado está “la política”
(conjunto de prácticas, discursos e instituciones que busca instituir un
determinado orden) como algo que nos trasciende, inunda todas las cosas, busca,
se instala y permanece. La/lo política/o está siempre presente.
Por
último, en el discurso por el Bicentenario (y sin nombrar a los angustiados San
Martín, Belgrano o Moreno), el Presidente reiteró en varias oportunidades
palabras como diálogo, juntos, verdad (más de diez veces), solidaridad,
escuchar, compromiso o las frases “sean protagonistas de su futuro”, “seamos
capaces” o “esfuerzo de cada uno”. Como un gurú del management y mezcla de pastor electrónico, apeló a convencer,
sumergido en un universo narrativo y creíble. Como en el marketing narrativo,
se buscó un efecto de creencia.
Debe
quedar claro que acceder al sentido es siempre lingüístico. Toda
conceptualización se produce en el plano del lenguaje y el lenguaje no es
neutral, ni inocente ni desinteresado. Como alguna vez dijo Antonio Carrizo, a
veces una palabra vale más que mil imágenes.
*
Licenciado y profesor en Ciencias de la Comunicación. Docente universitario
(UBA).
Para la clase de trabajos prácticos del jueves
2 de marzo:
Estudiar
“Discurso
político y poder”, es el capítulo 15 de DISEÑO.COM
“Derecho
de muerte y poder sobre la vida”, en Historia de la sexualidad I, Michel Foucault
En Módulo 2